Los padres que solamente piensan en trabajar y renunciar a muchos de sus sueños poniendo los intereses de los hijos, pero de una manera en la cual es como llevar una mochila en la espalda porque se sienten frustrado en sus anhelos; son aquellos que después con el tiempo terminan reprobándole a los hijos con el famoso refrán: “si yo no te hubiese dado….”  “si yo te di todo , en cambio vos….” Etc. Son en una palabra los padres que después crean una mentalidad en el niño de culpable.   En el otro extremo están los padres que para no sentir llorar a su hijo, o el reclamo normal de un niño que desea obtener algo; entonces meten la mano en el bolsillo y se lo compra. Complaciéndolo constantemente criando así a un niño que se le hace fácil conseguir lo que quiere. Estos niños con el tiempo y mayor mente a temprana edad son los agresivos tanto en lo físico como en lo verbal, ya que ante otra persona que no le de con los gustos como lo hace su padre su reacción es violenta.   Por último mencionaremos aquellos padres que realmente no pudieron hacer realidad los sueños propios y entonces los más mínimos avances del hijo lo demuestra como algo extraordinario y que nadie es mejor que su hijo. Una muestra más de un padre que tiene complejo de inferioridad ante la sociedad y utiliza a su hijo para equiparar lo que él no puede ser o hacer.
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